Cuando entenderemos que la verdad vive y habita en nuestro interior. Que cada uno de nosotros es una verdad individual, que cada uno posee tanta sabiduría como cualquier maestro. Todos los maestros desean tener maestros no discípulos, no ovejas, eso lo desea el político, el religioso, el corporativo, el que tiene el poder desea tener súbditos, esclavos de sus ideas, de sus deseos, no quiere verdades solo desea que se escuche su voz. Hasta cuando solo somos seguidores, fanáticos de algo o de alguien. Vivimos esclavizados por las mentiras que nos cuentan otros, pues solo creemos que vivimos, cuando solo somos sombies humanos, esclavos de toda la mierda que nos han metido en la cabeza, ideas creadas. Hemos perdido la capacidad de pensar, de crear, de cuestionar, y en definitiva de Ser nosotros mismos. Creemos que somos un número, y eso debido a la política, al que detenta el poder. Somos estadísticas, porcentajes, números para que el poderoso no le pese en la conciencia, ver caras, rostros humanos le impedirían dormir por las noches mientras nos convierten en borregos y ganado.
Las personas están muy ocupadas para encontrarse consigo mismas, meditar es imposible, porque las pocas horas que tenemos libres las usamos para ver televisión, no podríamos meditar media hora, porque es mucho tiempo, pero podemos estar 3 o 4 horas viendo televisión. Mientras nos aniquilan el ser. Solo vemos la vida de otros que fingen una supuesta vida, no tengo nada en contra de la actuación pero es la verdad, solo están actuando ser otra persona, y nosotros vemos mentiras. Falsas historias creadas para darnos sueños falsos y realidades inexistentes.
¿Cuándo despertaremos para poder ver la realidad?, quizás ya la hemos visto, pero es mas fácil seguir fingiendo un poco más, mientras nos perdemos en esa falsa realidad.
Seguimos ídolos, a otras personas, en vez de seguirnos a nosotros mismos, seguimos religiones, que no han sido creadas sino para gobernarnos, para dividirnos, para ejercer el poder sobre nosotros, control esa es la verdad. Ni Buda ni Cristo inventaron religiones, ellos solo deseaban mostrarnos que podemos ser libres, no tuvieron dinero, y aun cuando tuvieron poder no lo usaron para su beneficio, solo deseaban libertad. Pero esa libertad solo se halla en nuestro interior, ellos no querían que los siguiéramos, ni que les adoráramos, solo que encontráramos a Dios en nuestro corazón, que halláramos la verdad de nuestro ser. Que encontráramos el verdadero amor, la paz, y la felicidad en nuestras propias existencias. Pero todo eso fue utilizado por otros humanos más listos que se dieron cuenta que podían usar eso como mecanismos de poder.
[...]
Vivimos sin cuestionar nada, todo lo aceptamos, no tenemos capacidad de comprensión, de critica, de análisis, o de ejercer algún punto de vista sobre algo, solo obedecemos a otros seres humanos. Tan ciegos o más que cualquier otro, ciegos guiando a otros ciegos, incluso peor porque algunos están dementes. Si viviéramos en libertad no existiría la política, o los políticos, ni los líderes, porque cada uno de nosotros sería líder, sería guía, el mundo no necesita, a un Bush, o a un Obama, o un Chavez o Zapatero, ni un Gadaffi, los políticos no son necesarios para que la humanidad funcione, eso aún no lo podemos comprender, porque vivimos de ilusiones, llenos de ilusiones, de ficción, de mentiras, nos han contado cuentos, historias y las hemos creído. Aun creemos que necesitamos religiones, papas, sacerdotes, iglesias, mezquitas, sinagogas, porque creemos que la religión es nuestra espiritualidad, la espiritualidad habita en tu ser, dentro de ti. Tú eres tu religión, tu templo, tu Dios, tu verdad, tu fe, tu propio amor. Existen más de 6 mil millones de verdades, de religiones, de templos, de Dioses, de fes, y amores diferentes únicos y maravillosamente unidos.
Ojala pudiéramos comprender y ver, dejar de ser ciegos, y zombies, espero que algún día podamos entender que solo hay que ser, tu vida se trata de eso, de ser tu mismo y de vivir felizmente, en libertad.
No espero que creas lo que pienso, solo espero que cuestiones lo que tu piensas y yo pienso sobre el mundo. No debemos creer nada, hay que estar seguros.
Sé que no puedo cambiar el mundo, pero estoy seguro que sí me puedo cambiar a mi mismo.
Publicado por Gabriel Gonzalez Gomez el marzo 28, 2011
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